Esperamos gemelos: MARAVILLOSO!
Ha sido una experiencia extraordinaria: después de varios (muchos) intentos en Italia, mi mujer me convenció de jugarnos la última carta en España.
Pensé que iríamos a unos de los muchos hospitales españoles que son más o menos parecidos a los que tenemos en Italia, pero en los que, desafortunadamente no hablan la única lengua que dominamos mi esposa y yo, el italiano. Fue toda una sorpresa, realmente agradable y tranquilizadora cuando, después de tomar la decisión de hacer el viaje (un muy caluroso viaje), llegamos a HC Marbella International Hospital; los dos coincidimos felizmente en que lo que veíamos ante nosotros no tenía nada que ver con cualquier otro hospital de español: un enorme y cuidado jardín, una piscina y todo mantenido con el máximo cuidado. Aquello me hizo sentir bien… ¡y no sólo a mí! No obstante, lo que nos dio tranquilidad y serenidad fue conocer a una preciosa señora rubia que nos sonreía y que hablaba italiano mejor que yo.
Después conocimos al Dr. García y a la bióloga María José, muy amables y serviciales que nos aclararon todas nuestras dudas y preguntas. Pasadas unas horas, me era muy difícil parecer sereno frente a mi esposa (que estaba peor que yo). Conocer a las personas que nos iban a ayudar a conseguir nuestro sueño, nos hizo olvidar rápidamente las dificultades y las píldoras amargas tragadas durante los últimos años. Veía a mi mujer tranquila y confiada (no estaba fingiendo: conozco a mi esposa) y eso hizo que me sintiese bien.
Fuimos a la clínica un par de veces; la tarde en que le hicieron la transferencia a mi mujer, yo pude ser testigo, realmente estaba feliz de no perderme un momento tan importante. Fiona (la señora rubia y sonriente) me explicaba todo lo que acontecía, señalando el monitor, sujetando la mano de mi esposa para tranquilizarla, todo eso hizo que, gracias a la voluntad de todos, en unos pocos días fuésemos capaces de establecer una verdadera relación de confianza.
¡Lo olvidaba! Lo pasamos muy bien en Marbella: el mar es muy agradable, buena comida y, si uno se organiza, tampoco tiene por qué gastarse demasiado, por ejemplo, se puede coger el autobús, que pasan regularmente, por menos de un euro y medio, evitando el uso de taxis.
Para terminar les saludo y, si todavía no se atreven a dar el paso por no viajar hasta España, les comento una última cosa: Tengo 50 años, mi mujer tiene algunos menos, pero hace unos pocos días hemos tenido la confirmación de que estamos esperando gemelos: MARAVILLOSO!
¡Saludos a todos!
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